La comediante hizo un show en vivo en Los Ángeles esta semana, a la que asistieron algunos periodistas, en el que terminó hablando de su salida de su famoso programa de entrevistas, el que llegó a su fin en 2022 a raíz de los reclamos de algunos ex empleados de que el lugar de trabajo era una pesadilla.

Ellen dijo: "¿Qué más puedo decirte? Oh sí, me echaron del mundo del espectáculo. No hay gente mala en el mundo del espectáculo".

Y añadió: "El odio continuó durante mucho tiempo y yo intentaba evitar ver las noticias. La chica de 'sé amable' no era amable. Ese era el titular. Me convertí en un personaje unidimensional que regalaba cosas y bailaba subiendo escalones... ¿Bailaría una persona mala subiendo escalones? Si hubiera terminado mi programa diciendo: 'Vete a la mierda', la gente se habría sorprendido gratamente".

Ellen también dijo que en realidad esta era la segunda vez que era expulsada del mundo del espectáculo, refiriéndose a la violenta reacción que recibió en los años 90 cuando salió del armario, y añadió que habrá una tercera vez con el tiempo por ser "mala, vieja y gay".

Aunque ella se está riendo de todo el calvario, se puso seria en varios momentos en el set, diciendo que las secuelas tuvieron un gran costo para su ego y su autoestima, señalando que la gente en Hollywood o te ama o te odia, y que el odio a menudo supera al amor.

También dijo esto: "Honestamente, estoy haciendo bromas sobre lo que me pasó, pero fue devastador, de verdad. Simplemente odié la forma en que terminó el programa. Yo amaba mucho ese programa y odié que la última vez que la gente me vio fuera de esa manera".

También dijo que el escándalo afectó mucho a su esposa Portia de Rossi y aunque estuvo deprimida por un largo tiempo, está agradecida de estar de vuelta en los escenarios.