Erika de Souza Vieira Nunes fue captada en un video de vigilancia poco antes de entrar al banco e intentar pedir un préstamo con su pariente fallecido. Como se ve en la grabación, ella estaba preparando una silla de ruedas afuera de un taxi y luego solicitó ayuda al conductor para levantar el cuerpo de su tío fuera del asiento del pasajero delantero.

Tras colocar a su tío Paulo Roberto Braga en la silla de ruedas, el conductor cierra la puerta del carro y se da a la fuga. Se puede ver también cómo Erika le paga al conductor, mientras el cuerpo demacrado de Paulo se desliza hacia un lado.

Aunque no hay sonido en las imágenes de vigilancia, los transeúntes parecen expresar su preocupación por Paulo e incluso un hombre se acerca a Erika para hacerle una pregunta. El testigo es visto señalando el cadáver de Paulo y mirando nuevamente antes de alejarse.

Aunque la hora de muerte de Paulo sigue sin estar clara, Erika también fue vista llevándolo a urgencias un día antes de la visita al banco. En las imágenes, Paulo aparece sentado, claramente vivo, mientras Erika empuja su silla de ruedas hasta el centro médico.

Según la Revista Forum, Paulo pasó una semana en el hospital recibiendo tratamiento y fue dado de alta el 15 de abril. Erika y Paulo habrían regresado al hospital horas más tarde.

Las autoridades declararon previamente que creían que Paulo llevaba muerto unas horas antes de que Erika lo llevara al banco en un intento por conseguir un préstamo de 3.400 dólares. Erika afirma que Paulo murió mientras estaba sentado en la silla de ruedas en el banco, o eso es lo que está argumentando como su defensa.