Actualmente, el pub y hotel York & Albany en Londres está invadido por al menos seis okupas, que parecen haber irrumpido en algún momento de este mes. La policía local está al tanto de la situación, pero afirman que no pueden hacer nada al respecto.

La Policía Metropolitana declaró a los medios de comunicación británicos que la presencia de los okupas responde a un asunto civil y que hasta que no se cometa un delito tienen las manos atadas y no pueden echarlos.

Los okupas que han entrado y salido del pub en los últimos días se lo han apropiado: entablaron las ventanas, duermen la siesta en los sofás del interior y hacen de las suyas en el edificio. Incluso colocaron un cartel en la fachada en el que aseguran que tienen todo el derecho a estar allí.

Dicen que siempre hay al menos una persona allí y que cualquier intento de echarlos va contra la ley. Además, "Los ocupantes", tal y como se hacen llamar, declaran: "Si quieren echarnos, tendrán que presentar una demanda de posesión en el tribunal del condado o en el Tribunal Superior".

La razón por la que creen que no existe un impedimento legal para ello es que, en Inglaterra, técnicamente los okupas pueden tomar posesión de un edificio no residencial (como este) sin ningún problema.

Por ahora, no está muy claro si el pub realmente se estaba atendiendo antes de que irrumpieran los okupas. Este restaurante se había arrendado a Gordon hace años, y en la última década, el reconocido chef había estado tratando de rescindir el contrato de arrendamiento en una larga y complicada disputa legal.