Fuentes policiales le dicen a TMZ que los oficiales de LASD respondieron a una llamada el martes justo antes de la medianoche en un hotel de West Hollywood. La estrella de "Selling Sunset" les habría dicho que creía que alguien estaba vigilando digitalmente su habitación con cables y micrófonos.

Nos dicen que ella también expresó su temor de que alguien estuviera tratando de obtener información de su tarjeta de crédito.

Según nuestras fuentes, Christine le dijo a los agentes que su marido, Christian Dumontet, era probablemente el responsable de estas supuestas escuchas. Sin embargo, nos dicen que los oficiales registraron la habitación del hotel de Christine y no encontraron ninguna evidencia de cables o micrófonos, contrariamente a su insistencia.

De hecho, nos dicen que nada se veía raro, pero que la agente de bienes raíces de Netflix todavía tenía preocupaciones. Dado que ningún delito era evidente, los oficiales realizaron un reporte y dejaron las cosas en su lugar.

Sin embargo, el incidente claramente inquietó a Christine y como hemos contado, su sospecha se parece a otras afirmaciones que hizo en su solicitud de orden de restricción el miércoles, donde hace eco de sentimientos similares sobre Christian. Esto, después de que su orden de protección de emergencia caducara.

Como hemos informado, Christine alega que Christian la ha estado monitoreando digitalmente. En la presentación de la orden temporal, le pidió específicamente a los tribunales que mantuvieran a Christian lejos de ella y de sus cuentas electrónicas.

Por supuesto, Christian pintó un cuadro diferente. Después de haber sido arrestado por asalto con un arma mortal la semana pasada, presentó su propia solicitud de TRO, negando que alguna vez fuera violento con Christine y su hijo, y alegando, en cambio, que la estrella de los realities hizo acusaciones de violencia doméstica para utilizarlas en su contra en un posible caso de divorcio. Su solicitud fue denegada en espera de una audiencia.