La CBS y la Liga Nacional de Fútbol Americano acaban de anunciar la ridícula audiencia, informando que el partido de los Chiefs contra los 49ers superó al de los Chiefs contra los Eagles del año pasado (115,1 millones) como el más visto de todos los tiempos.

Ni siquiera estuvo cerca: 120 millones lo vieron por televisión y el resto en otras plataformas. De hecho, la cadena afirma que más de 200 millones vieron al menos parte del partido.

Esto no es raro, dada la cercanía de Taylor Swift con el partido. El Super Bowl, con o sin la estrella del pop, es siempre la noche más importante de la televisión estadounidense. Si a eso le sumas la mayor estrella del planeta, la tormenta de audiencia es perfecta.

Para su información, los Super Bowls se llevan 8 puestos entre los 10 programas de televisión más vistos de la historia.

Los resultados también fueron ayudados por las superestrellas del partido: Patrick Mahomes, Travis Kelce, Christian McCaffrey, etc., y las estrellas son un factor importante cuando se trata de ratings.

Usher también ofreció un impresionante espectáculo en el descanso de medio tiempo, lo que presumiblemente atrajo a muchos espectadores.

El efecto Swift en la NFL ha sido considerable, algo que incluso admitió el comisionado Roger Goodell en los días previos al partido. ¿Qué impacto ha tenido? Según los informes, los Chiefs y la liga han ganado más de $330 millones en cobertura gratuita por Taylor.

Eso se ha traducido en un masivo aumento de la base de fans de los Chiefs y de la popularidad de Kelce. Ahora se puede agregar el Super Bowl más visto de la historia a esa lista.