El actor de "Beverly Hills, 90210" publicó un largo mensaje en Instagram el lunes, primero calificando el incidente de "alarmante" antes de profundizar en lo sucedido y dar su opinión sobre lo que se debería hacer para combatir la anarquía en el futuro.

Ian explicó que uno de los mini motoristas se acercó agresivamente a su carro, lo que dio lugar a una "inquietante confrontación" cuando se bajó para "evaluar cualquier daño" a su vehículo estacionado en Hollywood Boulevard en la víspera de Año Nuevo.

Dijo que el encuentro con el motorista y los otros "se intensificó hasta un altercado físico", que se vio obligado a afrontar para protegerse a sí mismo y a su hija de 10 años, Penna, expresando el alivio que siente de que ambos estén "completamente ilesos".

Luego el actor apuntó a los funcionarios de Los Ángeles y reveló que está "profundamente preocupado" por la "creciente audacia de tales grupos", lo que está causando problemas de seguridad pública y perturbando la paz.

Señaló que el ataque a plena luz del día puso de relieve un problema mayor sobre "vandalismo en nuestras calles y la necesidad de contar con respuestas de la ley eficaces a tales comportamientos".

Ian también escribió: "Como ciudadano y como padre, me parece inaceptable que esos grupos puedan participar libremente en este tipo de comportamiento, causando miedo y caos, mientras la respuesta de las autoridades parece insuficiente".

Terminó las cosas instando a los funcionarios de la ciudad a tomar medidas decisivas contra este comportamiento fuera de la ley y a proporcionar más recursos policiales para evitar que ocurran en el futuro.