Kevin Costner y su próximamente ex esposa, Christine Baumgautner, parecían destinados a pelear por su divorcio durante meses. Pero todo llegó a su fin el martes.... lo que hace aún más interesante, y sorprendente, mirar para atrás y ver cómo fue que llegaron aquí.
Empezando el camino desde el principio, tenemos que remontarnos a mayo, cuando Christine presentó por primera vez los papeles para poner fin a su matrimonio. La ruptura tenía todos los indicios de ser fea, empezando por el hecho de que su decisión de divorciarse de Kevin salió aparentemente de la nada ... y que lo sorprendió por completo.
Lo que siguió en los futuros cinco meses, puede calificarse como uno de los divorcios de celebridades más desagradables en la memoria reciente. Esto, a pesar del hecho de que había un acuerdo prenupcial firmando de antemano.
Desde el principio, Christine había indicado que pretendía impugnar la validez del acuerdo prenupcial, partiendo por el hecho de que puso resistencias incluso para salir de su casa, algo que era un requisito predeterminado si se divorciaban alguna vez.
Después de un montón de idas y venidas por ambos lados, Christine finalmente reculó y se fue al carajo, pero esperó a que casi se cumpliera la fecha límite a finales de julio para hacerlo. Tienen que tener en cuenta que Kevin le había dado más de un millón de dólares para conseguir su propio lugar, según lo que él ha dicho.
Además del drama de la vivienda, se añadió todo el desagradable asunto de la manutención de los hijos, que había sido impugnada por Christine desde el principio. Recordemos que en un comienzo, ella le pidió a un juez que le exigiera pagar a Kevin la suculenta suma de 248.000 dólares al mes para mantener a sus tres hijos adolescentes.
Kevin, por supuesto, se burló de eso e insistió en que el número realista probablemente estaba más cercano a los $63k al mes. Y aunque por poco tuvo que soltar $129k mensuales... finalmente un juez se puso de su lado en el asunto, y dictaminó que $63k era en realidad un monto adecuado para mantener a los niños.
En medio de todo este lío y las desaveniencias de dinero, los Costners se fueron de vacaciones -dos veces, en realidad- y sus hijos pudieron disfrutar de sus respectivos viajes con papá y mamá. Christine los llevó a Hawái durante una semana, mientras que Kevin voló a Aspen para compartir de un viaje rápido.
En agosto, volvieron a la mesa de los abogados, para acalarar si Christine "entendía" o no el acuerdo prenupcial que firmó hace mucho tiempo, algo que ella y sus abogados argumentaron que podría no haber sido totalmente claro para ella.
Kevin y Christine se presentaron vestidos de punta en blanco para la ocasión, y lo hicieron nuevamente ante un tribunal oficial para discutir detenidamente algunos puntos adicionales. Ambos se subieron al estrado para aclarar una serie de cosas, incluyendo los asuntos de dinero, losrumores de nuevas parejas y más.
Al final, un juez se puso del lado de Kevin en esto también y dijo que el acuerdo prenupcial era claro, y ordenaba a Christine a pagar un poco más de $14k para litigar este detalle minúsculo. Christine, a continuación, se volvió y dijo que no estaba siendo quisquillosa, sino que preventivamente estaba pidiendo más dinero a Kevin para cubrir los honorarios anticipados de sus abogados (más de $ 885k), sobre la manutención conyugal.
Esta fue la última ofensiva hace apenas unos días atrás, y no parecía haber un final cercano hasta que en un movimiento sorpresa, Christine y Kevin decidieron bajar sus armas.
Como informamos, ambos llegaron a un acuerdo, cuyos términos se mantienen en privado por ahora. Si parecía que Christine estaba dando tumbo tras tumbo en la corte, hoy podría haberse anotado una pequeña victoria después de todo. De acuerdo a nuestras fuentes, se fue con más dinero de lo que se le debía en virtud de los términos originales de su acuerdo prenupcial. Y así es como termina todo...
Este episodio será recordado por largo tiempo ... y sin duda vale la pena sumergirse en sus altos y bajos para apreciar el cuadro completo. ¿Alguien dijo montaña rusa?