Un grupo de comunistas hicieron lo que Jason Aldean dijo que "no se debe hacer en un pueblo pequeño", solo que aquí lo hicieron en una gran ciudad... y recibieron el castigo de la ley.
Más de 20 miembros del Revolution Club de Chicago —autodenominados comunistas— organizaron una protesta el sábado fuera del concierto de Jason en Chicago, donde marcharon, cantaron y quemaron banderas. Sí, prendieron fuego a la Vieja Gloria, un par de veces de hecho.
Varios de ellos se manifestaron específicamente contra Jason, diciendo que no tenían miedo de intentar cualquier cosa en cualquier lugar. Lo llamaron "pedazo de mierda fascista". Un tipo que estaba en un megáfono también gritó: "Lo intentaremos en una gran ciudad. Y lo haremos delante de tu concierto".
La manifestación parecía ser anti-Jason, pero también anti-América. Uno de los cánticos incluía la frase: "A la mier... los EE.UU. y todo su poder", entre otros comentarios despectivos.
Finalmente aparecieron varios agentes de la policía de Chicago y les dijeron que se marcharan, anunciando que su reunión era ilegal y que estaban alterando el orden público. Al parecer, el grupo se dispersó poco después sin más incidentes así que no hubo detenciones.
Es evidente que la polémica suscitada por la exitosa canción de Jason "Try That In a Small Town" sigue resonando en todo el país, incluso semanas después. Y, sin embargo, sigue yendo a un montón de grandes ciudades y atrayendo a una multitud.
Jason tiene previsto estar de gira hasta finales de octubre, momento en el que realizará varias paradas en la costa oeste. Veremos cómo resultan esas presentaciones.